San Antón, patrón de los animales

Con el cabreo de ayer debido a las informaciones que nos llegan día sí y día tambien olvidé por completo que ayer Jueves ,  17 de Enero, fue día de San antón, Patrón de los animales …. Estaba tan indignada que lo pasé por alto… una amiga me lo recordó pero ya tenia casí terminado el post y pensé en hacerlo hoy…

Pese a la bomba informativa caída en las últimas horas y a pesar de que a nadie le consta nada, según los afectados, he decidido morderme la lengua y callarme la boca y dedicar el post una vez mas a los animales… prefiero no envenenarme la sangre y aprovechar el fin de semana en toda su plenitud… Como suele decirse, mañana, o en este caso, el lunes, será otro día … ya tendré tiempo de que se me calienten los cascos….porque me da que la cola de este traje de novia…. va a ser muy, pero que muy larga…. y no huele a flores…

Ayer fue el día de San Antón y en muchos lugares se bendice a los animales….

A San Antonio se le consideró el padre de los monasterios de monjes, y por ello se le llama «Abad» que significa «padre».

Sus atributos son un cerdo un perro y un gallo.

Se le invocaba para proteger los campos y a los animales de La Peste.

De pequeño no le enseñaron a leer ni escribir, pero sí le educaron fuertemente en la fé cristiana.
A los veinte años quedó huérfano de padre y madre, y al entrar a una iglesia oyó leer: «Si quieres ser perfecto, vende lo que tienes, y dalo a los pobres»….

….vendió las 300 fanegadas de tierras que sus padres le habían dejado en herencia, y repartió el dinero a los necesitados. Hizo lo mismo con sus casas y mobiliarios. Sólo dejó una pequeña cantidad para vivir él y su hermana.
Poco despues  oyó leer en un templo aquella frase de Cristo: «No os preocupéis por el día de mañana», y vendió el resto de los bienes que le quedaban, y asegurando en un convento de monjas la educación y el futuro de su hermana, repartió todo lo demás entre la gente más pobre, y él se quedó en absoluta pobreza.

Se retiró a las afueras de la ciudad a vivir en soledad y oración. Vivía cerca de  un convento de monjes y de ellos fue aprendiendo a rezar y a meditar. Le enseñaron a leer y su memoria era tal que lo que leía lo aprendía.
Recordando la frase de San Pablo: «El que no trabaja que no coma» aprendió a tejer canastos, y con el trabajo de sus manos conseguía su sustento y aún le quedaba para ayudar a los pobres.
Su fe era tan grande que de pronto oía hablar de algún monje o ermitaño muy santo, y se iba hacia donde él a escucharle sus consejos y tratar de aprender cómo se llega a la santidad.
Pasaba muchas horas del día y de la noche rezando.

No comía ni bebía nada jamás antes de que se ocultara el sol. Y su alimento era un poco de pan o de dátiles, un poco de sal, y agua.

Cuenta la leyenda que un día el demonio enfurecido porque no lograba vencerlo le dio un golpe tan violento que el santo quedó como muerto. Vino un amigo y creyéndolo ya cadáver se lo llevó a enterrar, pero cuando ya estaban disponiendo los funerales,  recobró el sentido y se volvió a su choza a meditar. Allí le dijo a Dios ¿Adónde te habías ido mi buen Dios cuando el enemigo me atacaba tan duramente? Y una voz del cielo le respondió: «Yo estaba presenciando tus combates y concediéndote fuerzas para resistir. Yo te protegeré siempre y en todas partes».
A los 35 años de edad sintió una voz interior que lo invita a dedicarse a la soledad absoluta. Hasta entonces había vivido en una celda, no muy lejos de la ciudad y cerca de otros ascetas.
Se fue lejos al otro lado del río Nilo, él nació en Egipto, que no lo habia dicho.

Encontró un cementerio abandonado y allí se quedó a vivir.

Aquel terreno estaba infestado de serpientes venenosas. Les dio una bendición y ellas se alejaron.

Durante los años que vivió solo descubrió la sabiduría y el amor eternos al observar a la naturaleza. De este modo, cogió la costumbre de bendecir a los animales y a las plantas. A partir de su muerte, San Antonio Abad fue invocado como protector de los animales domésticos

….. Ellos, los animales, tambien tiene derecho….

Ultimamente la costumbre de bendecir a los animales se ha ido perdiendo, quizá por causa de los párrocos de algunas iglesias… algunos piensan que es una tradición chapada a la antigua y digo yo… no son chapadas a la antiguas todas las tradiciones, sobretodo las de la Iglesia?….. Y sin embargo se siguen celebrando… No sé, tú mismo…. Yo no soy creyente especialmente pero ¿qué hay de las personas quieren bendecir a sus animales?… Tambien tienen derecho….

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